Nos adentramos en la estación más fría del año, el invierno. Nos apetece estar en casa, con la mantita y la estufa. Pero esta época del año es la que más incendios hay en los pisos, y la mayoría de las veces es ésta, la estufa, la causante.
Los edificios más nuevos ya están diseñados para la prevención de incendios con la colocación de puertas ignífugas en las escaleras o entradas al garage, luces de emergencia, extintores, detectores de humo, bocas de agua… Todo ello debe estar al día en las revisiones.
Una vez declarado el fuego:
Primero intentaremos extinguirlo dentro de nuestras posibilidades, marcándonos hasta dónde somos capaces y poniendo sobre todo sentido común. Recordemos que la mayoría de los grandes fuegos empiezan con un pequeño conato, fácilmente extinguible sin tener experiencia.
Si no lo conseguimos o no nos vemos capaces de ello, seguiremos nuestro plan particular, cerrando la puerta donde se encuentra el fuego para tratar así de confinarlo evitando su propagación a otras zonas
Ve hacia un lugar donde puedan verle desde el exterior y cierre todas las puertas que atraviese.
Pon ropa mojada (sábanas, toallas, camisetas…) en las rendijas de la puerta para evitar el paso del humo.
Llama al 112 y hágase ver desde el exterior.
Y ante todo, conservar la calma.
Todos los vecinos de la Comunidad de propietarios deberían ser conocedores del plan de evacuación encaso de incendio y las medidas de prevención.
Además de que se lleve a cabo revisiones periódicas de mantenimiento en la finca de las instalaciones eléctricas, de gas, alarmas, obstrucciones, extintores, etc, para su prevención y buen funcionamiento.
Compartimos una infografía del Cuerpo de Bomberos sobre lo que hay que hacer en cada caso y su prevención.